martes, 14 de octubre de 2014

Primer visita al veterinario


Y acaba de tener su primera visita con el veterinario... Nos fue bastante bien. Para ser una perrita de la calle, sus condiciones estaban muy bien. 
Las garrapatas ya no son un problema, y ahora viene el desparasitaje. 


Es una perra muy fundida... Estuvo tranquila mientras me tenía a la vista.
Le sacaron esas asquerosas bichas y le controlaron su peso y le dieron sus antiparasitarios. En unas dos o tres semanas más tenemos que ver lo de sus vacunas, ya que primero hay que reforzar su organismo con sus alimentos y, hasta me sorprendí de oirlo, con chamito..., si, esos yogurth que ayudan a reforzar la flora intestinal... 

Ahora tiene su carnet de salud y una cadenita para sacarla a pasear, aunque la salida de hoy la agotó porque comió y ya está calladita durmiendo... :D
Corrió un buen poco y se revolcó en pasto... como una cualquiera. 

En un momento se enredó en los pies de la mamá de Lucía y le pasó a pisar su patita, aunque no fué fuerte, lo gracioso es que hizo teatro y levantaba su manita como diciendo "me duele, me duele"... una vez que tuvo toda la atención, siguió como si nada... 
No estuve con la cámara en el veterinario, una pena, porque fue interesante y jocoso... Para su siguiente visita será...


Lucía aún está en duda con que nos quedemos con Chispas (estamos pensando en un nombre más bonito para ella), pero por la actitud que tiene hacia ella, lo más probable es que se quede con nosotros. 
Sería bueno tenerla en casa... para compañía y seguridad..., pues se ve que es mañosa... mientras no se revele con nosotros, todo va a estar bien.
Esta es "Chispas"... no sé que me movió a ponerle ese nombre. 
La rescaté ayer, 13 de octubre de 2014. Ya la había visto antes en la ciudad, merodeando solita hacía como una semana. En Mulchén.
Ayer la volví a ver. Echada en el frío suelo del terminal de buses interurbanos, y no pude dejara así. 
Siempre hablo de ayudar a las mascotas y que los humanos tenemos mucha culpa y responsabilidad en lo que está pasando con el tema de los perros callejeros, y debía hacer algo alguna vez. Pues se presentó la oportunidad. Pero más que eso, fue esa cara de tristeza y resignación a quedarse en la calle como muchos otros pobre perros que, por que llegan a ser muy grandes, o porque envejecen, o porque son hembras, las abandonan a su suerte.
 Estaba plagada de garrapatas, y eso la debilita mucho. 
Conseguí una caja y la subí al bus. En realidad, el chofer no permitía eso, así es que me dejó llevarla en el maletero.
ya había llamado a Lucía, y le había contado lo que estaba pasando, así es que le pedí que me comprara una de esas pipetas para los bichos y un poco de alimento para cachorros. 
No creo que tenga más de 2 meses. 
Se ha portado bien. 
Anoche despertó cerca de las 01:30. Quizás por miedo. Quizás por la desesperación que debe provocar tener esos parásitos en su pelaje, pero eso pronto va a terminar.
Ya no está sola.
Pero aún debemos decidir si vamos a darla en adopción o a quedarnos con ella. Yo me la quiero quedar. Es muy amorosa y me hace caso sin mayor esfuerzo. 
Tiene, por el momento, una caja para dormir, agua y comida a disposición, cosa que, creo que no había tenido desde que nació.
Veamos qué pasa.